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lunes, 27 de mayo de 2013

Dinero, patentes, justicia y biotopo.


Mi planteamiento en todo momento tiende a ser desde dos puntos de vista, lo que dice la ciencia y lo que dice la moral.

Por la ciencia entendiendo los bienes y los servicios en función de lo que requieren estos al biotopo y lo que le aportan en estabilidad dinámica. Por moral entiendo que nunca debemos perturbar esta estabilidad dinámica. Los habitantes de este biotopo son iguales a la hora de poder demandar bienes y servicios del mismo, millones de años de evolución nos han llevado a este tipo de estabilidad. Por esto el plantear el tema de "beneficios" fuera de lo que biotopo precisa para mantener esta estabilidad dinámica me parecen un gran error.

En la cultura actual el intercambio de bienes y servicios no contempla en absoluto este punto, tengamos en cuenta lo irracional de las distintas divisas:

En un amplio valle un río dibuja meandros hacia el sur; hay puentes que lo cruzan y asentamientos a cada lado del serpenteante agua. En dos meandros aledaños viven dos homo sapiens gemelos. Cultivan la mismo, pues los nutrientes aportados por el río y el asentamiento de suelos es igual en ambas orillas. La única diferencia mental entre los dos hermanos es el hecho de que el río marca una frontera jurídica. Teniendo cada margen una divisa distinta. Esto hace que de base la capacidad para obtener productos de un tercer territorio jurídico dependa de en que lado del río esté cada hermano. Digamos que por vivir a un lado tienes más o menos derechos tácitos de interacción con el resto del mundo.

Si observamos los cinco parámetros que dan cuenta del valor de una divisa frente a otra podremos saber como se enfrenta el sistema económico a la preservación del equilibrio dinámico del biotopo común. El cambio entre divisas está determinado por; consumo energético, cantidad de producción, cantidad de calorías consumidas per capita, nivel de ahorro y presencia de productos de un territorio jurídico en otro.
Este distinto valor de las divisas viene medido por parámetros que no observan nunca el equilibrio dinámico. El primer punto, el energético establece una relación lineal, a más energía consumida, más vale la divisa, sin entrar nunca en el fin del consumo ni en el tipo de fuente de producción de la energía, esto ya de base es una aberración. Un territorio jurídico que use principalmente una base de petróleo tiene más derechos de intervención en el biotopo que otro, por el simple hecho de consumir más. El segundo parámetro, el de producción peca de la misma injusticia, sobre todo en una sociedad donde se produce de forma que el usuario tiene dificultades para reparar todo aquello que haya adquirido, esto son las patentes. Esto ayuda a reforzar un hábito de consumo que nos desvía del equilibrio dinámico del biotopo. El tercer punto, provoca sociedades con problemas de salud, pues prima el exceso de grasas, gran fuente de calorías, recargando al sistema sanitario y por lo tanto desequilibrando otra vez al biotopo. El cuarto punto, el del ahorro es una de las mayores aberraciones lingüísticas de la cultura actual y forma parte directa de la estafa a la que estábamos mentalmente sometidos. Una divisa tendrá más valor por la cantidad de divisa depositada en entidades privadas, a esto se le llama ahorro, a guardar estampitas en cajas fuertes o registrar estampitas virtuales en discos duros. Cuantas más en los bancos más ahorro. La palabra ahorro se asigna de forma cultural a este tipo de acumulación y no a algo real como el ahorro de los recursos, por ejemplo el petróleo, el coltan, el agua, los plásticos, etc. Este punto tiene uno de los mayores grados de perversión cultural puesto que los bancos pueden "prestar" estampitas en proporción 9 a 1 de las estampitas depositadas, esto quiere decir que en un banco donde hay 1 estampita se puede hacer el "préstamo" de 9. Lo que coloquialmente ellos llaman anotación en cuenta. Es curioso esta forma de engrosar el montante común de 
estampitas, por que de hacerlo el propio estado se dice que las estampitas se devalúan. Cuando desde el punto de vista de las matemáticas el numero total de estampitas sería el mismo. Esta patente de producción de estampitas, es dejar el derecho tácito de intercambio de bienes y servicios en poder de unos pocos que curiosamente luego pedirán más estampitas a cambio de las inventadas. Voy a por el último punto que cierra este "juego" cultural de derecho a influir en el biotopo. La divisa de un territorio jurídico que coloque productos en otro territorio jurídico crecerá respecto a segundo. En este caso no es solo el problema de eliminar capacidades de los productores locales, si no que refuerza el primer punto por transporte lejano por lo tanto el desequilibrio.

Es por todo esto que no me gusta debatir sobre patentes argumentando derechos de inversión o leyes, pues son las leyes las que regulan esta forma estúpida de intercambio. Esto carecen de fundamento científico única rama cultural que da respuestas ciertas, justas y humildes.

A la hora de conservar este equilibrio dinámico que nos permite crear sociedad, el derecho justo de interacción con el medio debería de ir regido por costes reales y no por costes de estampitas, pues estas no reflejan nunca el ahorro real por no nombrar lo que frena al desarrollo de las sociedades al dejar en pequeños lobbys el conocimiento y el derecho jurídico de uso. O nos regimos por lo que la ciencia dice o seguiremos el juego de quien siempre obtiene más perjudicando a todos

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